La falta de recursos no le permitían a doña Gloria Esmeralda Mejía construir una casa para albergar y brindar mejores condiciones de vida a su núcleo familiar. Esta necesidad fue tomada en cuenta por los gobiernos central y municipal para beneficiarla con un nuevo techo a través del programa de viviendas de interés social que impulsa el IVUR. Las llaves del digno hogar que ahora pertenece a doña Gloria Esmeralda y sus hijos, le fueron entregadas el pasado viernes en el barrio Paz y Reconciliación.